1) Impulso de la competitividad. Los países impulsores del Pacto del Euro recomiendan una bajada generalizada de los precios, permitida por el descenso de los salarios, tanto de los empleados estatales como de los empleados privados: ataque a los posibles acuerdos de subidas salariales y los procesos de negociación colectiva.
Esto hace que la deuda la paguemos los trabajadores, cuando esta ha sido creada por la disminución de impuestos a las rentas altas y por el recate de los bancos.
La competitividad se obtiene en realidad con: la inversión en I + D, la buena cualificación del trabajador (requiere buenos sistemas educativos), entornos laborales de seguridad, estabilidad y expectativas de mejora profesional.
2) Impulso del empleo. Para ello pretenden reducir las cuotas que las empresas dedican a la Seguridad Social por cada empleado contratado, lo que afecta a los servicios sociales (sanidad, educación, pensiones), y al mismo tiempo se contempla el aumento de los impuestos indirectos (IVA, impuestos especiales, etc).
La precariedad e inseguridad laboral darán lugar a la pérdida de la productividad (descontento…); el gasto público aumentará por el aumento de las inspecciones (ataque a la economía sumergida), por el aumento de los incentivos a la contratación, por la mejora en la educación. La recaudación necesaria provocará un aumento de impuestos (IVA…).
3) Sostenibilidad de las finanzas públicas: el concepto sobre el que tratan de fundamentar este cambio es la supuesta inostenibilidad de los servicios públicos. Para ello van a acometer reformas "profundas" en los sistemas de pensiones, en el sistema sanitario y en el de prestaciones sociales; junto a la privatización de empresas y servicios públicos.
Se producirá, pues, un debilitamiento en las prestaciones sociales (pensiones, sanidad…); un aumento en los años de cotización, con la consiguiente disminución de los años de disfrute; se privatizará el agua, el transporte, la salud…provocando el deterioro tanto del servicio como de los empleos; se impedirá individualmente a cada país incrementar la demanda y la inversión pública para corregir su déficit y su deuda.
4) Reforzar la estabilidad financiera: no concretan medidas de ningún tipo, salvo apoyar con dinero público (rescate) a las entidades que lo necesiten.
Este pacto perjudica gravemente a los trabajadores y a las PYMES, beneficiando a las multinacionales y a la banca. No busca la coexión social y política, pues no cuestiona las crecientes desigualdades sociales y territoriales en Europa, ni buscan el control democrático de las políticas sociales y económicas.
